Saturday, March 01, 2008

El cubismo



El Cubismo. Las divisiones del cubismo.

El sistema de tradición secular en una visión del mundo con unas estructuras y formas fijas, que justificaba hasta finales del s. XIX la moderada evolución de los estilos y las tendencias artísticas. A un universo estático le correspondían unas formas invariables de representación visual. Así se mantuvo en Europa el modelo de representación inventado en la Italia del Renacimiento basado en la creencia de que un sistema matemático de relaciones geométricas reproducía científicamente la naturaleza de la realidad visual.

La variedad de manifestaciones que se conocen como “arte de las vanguardias”, se originó en el seno de la cultura occidental entre la primera década del s. XX y el comienzo de la 2ª Guerra Mundial. En esos 40 años se destruyeron de todo los modos posibles las imágenes convencionales que el viejo mundo había ido creando. La sucesión de tendencias artísticas de vanguardia fue vertiginosa. El arte tradicional quedó reducido a cenizas. La nueva concepción del mundo ya no era estática y eterna sino fragmentadora e inestable.

Diversas posiciones teóricas y concepciones estéticas convivieron en un espacio geográfico reducido, durante un período de tiempo muy limitado.El cubismo fue un movimiento artístico desarrollado de manera especial entre 1907 y 1914. Va a entrañar la revolución estética más importante acaecida desde el Renacimiento. El término “cubismo” procede de la frase despectiva de un crítico de arte.

Los artistas más destacados van a ser: Pablo Picasso, Georges Braque, Juan Gris y Léger. El problema central planteado es el de la representación del espacio, que partía de la base de considerar la visión humana como fija, monocular e instantánea. Los pintores cubistas desarrollaron un sistema representativo más rico, basado en el hecho de que la visión humana es móvil, se realiza con los dos ojos y se desarrolla en el tiempo.

Por ello los objetos aparecen en los cuadros cubistas contemplados desde diferentes puntos de vista, como desplegando sus diversas superficies, que no pueden ser observadas simultáneamente si se elige un solo punto de vista fijo. El resultado es un nuevo lenguaje plástico, de orden lírico y conceptual a la vez, que liquida el ilusionismo practicado desde el Renacimiento como única forma posible de representación.

El cubismo presenta los objetos tal como son concebidos por la mente y como existen en sí, y no tal como son vistos. En sus orígenes desempeñaron un papel importante. Cézanne, en su última época, la escultura negra y el descubrimiento del arte primitivo.

En su desarrollo se suelen distinguir tres etapas:

a) Cubismo primitivo, iniciado por “Las señoritas de Aviñón” (1907) de Picasso, al que pronto se incorporaron Braque y Juan Gris.
b) Cubismo analítico (1910-1912), que se caracteriza por la descomposición de las formas de objetos muy simples (botella, vaso, copa…) en colores sordos (verde oscuro, ocre, gris…), período que corresponde a la generalización masiva del cubismo y a su formulación teórica.
c) Cubismo sintético (a partir de 1913), iniciado a raíz de la estancia en Ceret de Picasso, Braque y Juan Gris, y con la incorporación de Leger.








2. Picasso (1881 – 1973) y Braque (1882-1963). La recuperación de Cézanne. Picasso y el arte Negro. Les Demosiselles de Avignon.

La aportación de los fauves, no afectó de manera radical a la idea del cuadro tradicional. Los objetos eran vistos desde un punto de vista determinado. El cubismo atacó a esta concepción de un modo sistemático, y de ahí que se le haya considerado como uno de los movimientos artísticos más revolucionarios de toda la historia del arte occidental.

Esta gran transformación la llevaron en solitario Picasso y Braque.. A partir de 1906 la pintura de Picasso se hace más escultórica y monumental. En 1907 aparece con “Las señoritas de Avignon”. Esta obra causó un impacto tremendo en todos los amigos del pintor. En ella todo está violentamente geometrizado, a base de triángulos, con agudos esquivamientos donde no es fácil determinar en todos los casos los límites entre el fondo y las figuras. Picasso sienta las bases de una pintura completamente nueva donde se regía por leyes que nada tenían ya que ver con las de la perspectiva renacentista.
Pablo Picasso y la Señoritas de Avignon en:

http://cv.uoc.es/moduls/XW01_04045_00736/moduls/mod_4/cas_08/index.htm

http://www.artespain.com/06-10-2007/grandes-obras/%E2%80%9Clas-senoritas-de-avignon%E2%80%9D-obra-con-la-que-picasso-revoluciono-el-mundo-del-arte


El arte negro, jugó también un importante papel en el primer desarrollo del cubismo. El punto de arranque es la atención suscitada en Picasso por la exposición en el Louvre, en la primavera de 1906 de las colecciones de relieves ibéricos de Osuna, y de hecho, su impacto se dejó sentir en los rostros del Retrato de Gertrude Stein y su Autorretrato.

La época Negra de Picasso, dejando atrás la etapa azul y rosa será así denominada, más razones etnológicas que cromáticas. Se ha establecido relación y coincidencia entre “ La Joie de Vivre” de Matisse y “Les Baigneuses” de Derain, en el sentido de que se recogen cada una a su manera, la herencia de la serie de bañistas de Cézanne. Hay algunas poses, como discretos homenajes de Picasso en sus “Señoritas” a la serie de Cézanne.

Picasso inicia el arte negro, en el que no faltan similitudes concretas de las máscaras y las esculturas ibéricas o africanas con los rostros de las “Señoritas”. Por encima de todo ello está el reconocimiento de la carga de intelectualidad que conlleva la plasmación de lo que se conoce en vez de lo que se ve de un objeto, que le llevó a la cristalización en una sola imagen de sus aspectos esenciales, fundiendo en el plano puntos de vista contradictorios, ahí radica la clave de la importancia de este lienzo y el auténtico punto de partida en la formulación cubista del espacio.

En las primeras realizaciones de la referida fase negra de Picasso, las distintas parte de sus figuras eran separadas por medio de líneas muy marcadas y distinguidas entre sí, como en la escultura africana, por la dirección de las estrías con las que se cubrían sus superficies. Es una fase dibujística y bidimensional que desembocará en la “Mujer de los Velos” (1907).

En 1908 se intentó dotar a sus imágenes de valores plásticos más precisos, sin renunciar al análisis de planos autónomos pero diferenciándolos entre sí, por el juego de luces y sombras que en ellos provocaba una fuente luminosa estratégicamente colocada.

Braque, pintó “” (1908) volviendo con unos paisajes de tonalidades apagados: verdes, pardos, grises y marrones oscuros. Lo más chocante era el modo de estilizar la realidad, no mediante la síntesis intuitiva, sino reduciendo las cosas (árboles, caminos, casas…) a formas geométricas elementales. Denotaba una preocupación por Cézanne mucho más al margen de sus aspectos puramente visuales que cualquier interpretación anterior.

Era quizá el primer reconocimiento de que su obra ofrecía por encima de todo una solidez constructiva que había pasado desapercibida en los análisis de los expresionistas; incluso frente al cromatismo de éste, Braque limitaba conscientemente a los ocres, grises y verdes de su paleta en estos cuadros de L’Estaque. También en 1908 la marca de un Cézanne intelectualizado se dejaba ver en la serie de la “Rue-des-Bois” de Picasso. Bajo la influencia de Cézanne hay que situar la serie de bodegones pintados por Picasso durante el invierno y primavera siguientes; su obra se hizo más profundamente pictórica y abandonó definitivamente el carácter plástico tan marcado de su última fase “negra”.

Algunas obras:

Picasso: Mujer de los Velos (1907), Mujer desnuda (1910), Hombre con clarinete (1911).
Braque: La Roche Guyon: le Cháteau (1909), Mesa Pedestal (1911), Naturaleza muerta ovalada, el violín (1914), Bodegón del Velador (1919).


3.- Evolución y fases de la experiencia cubista:

Cubismo analítico:

Los cuadros de esta época son de dimensiones medianas o modestas. La gama cromática muy reducida y apagada, los temas parecen insignificantes y se repiten incansablemente. Una maraña de líneas geométricas entrecruzadas descompone las figuras en una multitud de planos pictóricos: el fondo invade con sus curvas, esquinas importantes de los cuerpos. La profundidad ilusoria de tales pinturas parece limitarse a la de un bajorrelieve imaginario de límites equívocos.

No se persigue la unidad geométrica del punto de vista único, pues la nueva visión carece de “centro”. El cubismo analítico parece mirar la realidad a través de un prisma cristalino paradójico, porque no descompone la luz sino que la absorbe, haciendo que la forma se “refracte” en una multitud de quebraduras.

Entre 1911 y 1914 Picasso y Braque, siempre en una estrecha evolución paralela introdujeron en sus telas, letras de imprenta, números, papeles pintados y recortes de periódico. La pintura empezaba a parecerse a una construcción. El primer trabajo de esta nueva tendencia lo hizo Picasso y se conoce con el título de “Naturaleza muestra con silla de rejilla” (1912).

De esta última fase partieron los numerosos imitadores del cubismo, en París y en todas las capitales de la vanguardia internacional. Aunque Picasso y Braque expusieron poco durante el período que media entre la invención del cubismo y la Primera Guerra Mundial, su prestigio y repercusión fue notable. Algunos discípulos de ellos fueron Albert Gleizes (1881-1953) y Jean Metzinger (1883-1957).

El procedimiento analítico es usado para describir pictóricamente no solo uno sino varios objetos diferentes, indicados por un mínimo de detalles capaces de ayudar a su identificación; y relacionados entre sí, de una manera completamente al margen de Cézanne. El cubismo se ha convertido ya en un sistema autónomo de gran complejidad en el que cada elemento cumple la triple función de describir un aspecto del objeto, tomar parte en el espacio no ilusionista del lienzo y contribuir a la estructura general de la composición.

Cubismo sintético:

Los colores son apagados, a base de grises y tonos verdosos, y las líneas del dibujo se encabalgan formando intrincadas geometrías. Las cosas parecen representadas desde fuera y desde dentro, como si estuvieran hechas con un oscuro cristal de roca semitransparente y fraccionado. Se introducen letras no desde el ámbito de la pintura sino al de la tipografía. La introducción en las obras cubistas de textos más o menos enigmáticos, había permitido hacía muy poco, que la pintura volviera a recobrar ese diálogo con la literatura que existió en el Renacimiento y el Barroco, y que ya mantenían bien los nuevos medios de masas como el cine y la historieta.



Juan Gris (1887-1955) aprendió de Picasso las verdaderas intenciones y logros del cubismo sintético. Lo que en Picasso era intuición se hizo consciente en Juan Gris, de modo que no es raro que muchos vean en él la verdadera culminación del cubismo.

El caso de Fernand Léger (1881-1955) es diferente. Bajo el impacto del cubismo analítico, pintó sus “Desnudos en el bosque”. Este cuadro mostraba una reducción de las figuras y de los objetos a una extraña combinación de tubos grisáceos y verdosos. En “Contrates de formas”, mostraban cilindros, troncos de cono y planos metálicos amontonados, sin que podamos reconstruir un asunto, o un género pictórico tradicional. Léger geometrizó todavía más su estilo, siendo en los años 20 el pintor que mejor reflejó la fascinada obsesión por el mundo de las máquinas.

4.- Guillaume Apollinaire y los pintores cubistas. La influencia de la escultura.

Apollinaire, en un intento de integrar el cubismo más o menos ortodoxo en un movimiento de límites más amplios, en su ensayo “Les Peinares cubistas” (1913) engloba bajo la etiqueta del cubismo, cuatro tendencias diferentes:

1) Científica. Picasso, Braque y Gris. Define esto como el arte de pintar composiciones nuevas con elementos extraídos no de la realidad de la visión sino de la realidad del conocimiento.
2) Física. Le Fauconnier. Pese a pertenecer al cubismo por la disciplina constructiva, extraía la mayor parte de los elementos de sus composiciones de la realidad de la visión. Tiene un gran porvenir como pintura de historia. Su papel social es muy relevante, pero no es un arte puro. En él se confunden el tema con las imágenes.
3) Orfica. Delaunay (1885-1941), Leger, Picabia y Duchamp. Las composiciones estaban integradas por elementos extraídos no de la realidad visual sino enteramente creados por el artista y dotados por él de una poderosa realidad. Sus obras debían presentar simultáneamente un placer estético puro, una construcción que quepa bajo los sentidos y una significación sublime.
4) Instintivo. Las composiciones no tendrán su origen en la realidad visual, sino en lo que sugiere el artista el instinto y la intuición. Se le enlaza con el impresionismo francés, aunque no se le escapa la coincidencia entre estas características con el arte de Kandinsky esos mismos años.

En 1918, Jeanneret (1887-1966), más conocido después por Le Corbusier; y Ozenfant (1886-1966) publicaron el manifiesto “Después del Cubismo”. En él criticaban tanto la orientación decorativa que había tomado el nuevo lenguaje inventado por Picasso y Braque como sus desviaciones expresionistas. Propugnaban “el purismo”, basados en el orden y el rigor. Éstos pintaron naturalezas muertas de gran rigor geométrico. Evitan los escorzos y muestran simultáneamente las plantas y alzados de las cosas. Todas sus composiciones tienen un sesgo arquitectónico.

-Delaunay combinaba la descomposición cristalina de los planos de color con sugerencias protofuturistas. De ahí sus preferencias temáticas por la gran ciudad, o por un símbolo tan claro del progreso como la Torre Eiffel. Esto cuajó en un lienzo de gran empeño alegórico como “La Ciudad de París” (1910-1912).

-Roger la Fresnaye (1885-1925), un entusiasta de la aeronáutica moderna, a la cual exaltó en obras como “La Conquista del aire” y “Homenaje a Blériot” (1914).

Jackes Villon (en realidad era J. Duchamp) (1875-1963) evolucionó desde un cubismo frío próximo a las obsesiones del futuro por el movimiento, hasta un arte geométrico abstracto que debía mucho todavía a los grandes planos cromáticos del cubismo sintético de Juan Gris.

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